domingo, 14 de julio de 2013

Me has jodido la vida.

Así tal cual. Sin metáforas complejas, sin indirectas o eufemismos. La verdad desnuda en mis noches descarnadas, en mis peores y reales pesadillas.
La rutina y la ruina ya son una sola, y los precipicios los intuyo desde el fondo del recuerdo de tus pupilas. Mientras, vivo con el peso de haber perdido la mirada más bonita que me ha salvado jamás la vida.
Capaz. He sido capaz de romper lo indestructible, así que hubiera podido ganar aquel maldito juego con 1000 puntos de ventaja.
Y me siguen preguntando por qué no puedo dormir.
Ya solo sé desquiciarme frente a un papel para huir de mi propio fantasma, que está más vivo que yo. Otra ironía que me clava cristales en las venas y me pinta espejismos en la cama.
Si algún día mi memoria decide estrellarte contra el olvido, creo que la nada se comerá mi vida, y mis cenizas te llamarán a gritos desde el abismo.
Te prefiero como agonía antes que como vacío.
Y además sé que por mucho que corra, tu recuerdo siempre va a alcanzarme. Tal vez tenga que vivir con él clavado en las costillas.
No sé ni por qué grito en estas letras, si es inútil explicarle a un papel que nunca volveré a escribirme en tu cuello. Quizá llorar sirva para expulsar las emociones que ahogan, pero las noches pasan y lo que siento no cambia. Abrazar a un edredón es un placebo de mierda, y susurrarle a las paredes solo sirve para acabar dándoles de hostias a falta de respuestas.
Me he consumido en mi propia memoria y salgo corriendo ante cada imagen que me recuerda que no siempre he sido así.
Creo que tengo parkinson en el corazón, o en lo que sea que se retuerce ahí dentro mientras me esfuerzo en no morirme (más). Salvar a alguien de sus monstruos no sirve de nada cuando acabas convirtiéndote en el peor de ellos. Quizá debería habértelo dicho, aunque no me hubieras creído.
Y ahora a ti no te importa. Y ahora a mí no me consuela.
Me he convertido en una sombra que solo vive cuando se destruye. Espero que seas capaz de vivir con eso.
Espero ser capaz de no desaparecer yo.
M.A.G.

No hay comentarios:

Publicar un comentario