martes, 8 de mayo de 2012

Pero.

Pero hay que guardar siempre una sonrisa en el bolsillo.
Empiezo con esa palabra en concreto, porque dicen que todo lo que se ha dicho antes de ella, pierde valor.
Es una palabra de comienzos entonces ¿no? Quizás buenos, quizás malos, pero son comienzos al fin y al cabo.
¿Y qué mejor que negarme a mí misma y a la tristeza que yo implico, para construir una frase optimista?
Cada día cuenta, todo depende de lo que hagas con él. Ten cuidado con dejar atrás las cosas que te hacen ser tú; los anhelos, recuerdos y hasta los pequeños miedos que te constituyen, que son tan parte de ti como tu aliento o tu forma de parpadear.
Perdemos mucho renunciando a causas perdidas. O ganamos. Aún no lo he decidido.
Solamente sé que a veces soy todo risas, y al segundo un torrente de lágrimas. Podríamos hablar de (des)equilibrio. Sentir hasta el extremo, correr y nunca parar. Es mi manera de vivir.
M.A.G.

No hay comentarios:

Publicar un comentario